Agua Amarga se encuentra en el Parque Natural del Cabo de Gata. El litoral es aquí una sucesión de acantilados, de calas casi vírgenes y de pequeños pueblos, blancos y tranquilos que parecen situados desde siempre al margen de las prisas y la vida. Agua Amarga es uno de ellos. A pesar del desarrollo turístico que toda zona ha experimentado en las últimas décadas, aún es posible percibir los sencillos aires marineros que tiene en su raíces. Hace 15 años esta localidad apenas era una fila de casas blancas pegadas a la línea de costa, apretadas entre los eriales del desierto y la playa de aguas cristalinas. La zona cuenta, además, con un buen puñado de alicientes. A un paso, la playa de los Muertos, delicioso rincón hasta el que se llega por un corto sendero; o el risco de la Mesa de Roldán, otero perfecto para embobarse con las vistas panorámicas; o, más al sur, el Mirador de las Sirenas, ballet de riscos junto al faro; o la playa de los Genoveses; cortijos, molinos, o la noria del Pozo de lo Frailes, cerca de San José. Casi casi un paraíso. [Agua Amarga. Cabo de Gata. Almería. España, marzo de 1999 © Javier Prieto Gallego]. Puedes ver otras fotografías de mi archivo en este enlace.
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La playa de los Muertos. Situada entre Carboneras y Agua Amarga. Un sendero señalizado desciende hasta ella. Aguas profundas y azules para un remojón inolvidable.