Pueblos blancos, milagros y castillos en el sur extremeño
© Texto y fotografías: Javier Prieto Gallego
Los perfiles paisajísticos del sur de Extremadura, en los confines en los que Sierra Morena marca la frontera con Andalucía, se dibujan con castillos, hermosos pueblos de paredes blancas, leyendas e historia. Historia y leyendas que acostumbran a mezclarse, como suele, en el rastro que dejaron tras de sí los caballeros de la Orden de Santiago. Hasta aquí llegaron mediando el siglo XIII con la intención de hacer retroceder la frontera del Islam todo cuanto fuera posible. Después, una vez despejado el territorio, decidieron quedarse en él para fundar la provincia de León. Los ecos de aquellos tiempos, además de en las piedras de varias de las fortalezas que aún despuntan sobre los riscos de la sierra, también se descubren en el apellido de localidades como Segura de León, Calera de León o Fuentes de León.
Empezamos la exploración de este territorio poco transitado, a pesar de ser camino de paso desde que Roma trazó por él su Vía de la Plata, alcanzando una localidad cuyo topónimo suena a toros y toreros: Bienvenida. De ella procede la que tal vez sea la saga más famosa del toreo que adopto el topónimo como marca de la casa. Fundada hace 108 años por Manuel Mejías Rapela, cuenta entre sus miembros nombres como el de Antonio Bienvenida, fallecido el 4 de octubre de 1975 cuando toreaba unas vaquillas en la finca «Puerta Verde», en El Escorial.
En el centro de la población se abre la plaza a la que se asoman el Ayuntamiento, ubicado en una antigua Casa de la Encomienda Santiaguista, la iglesia de Nuestra Señora de los Ángeles o la casona de los Jaraquemada. El templo, de estilo gótico mudéjar, fue realizado en el siglo XV. Su hermosa torre de ladrillo y remate barroco fue concluida en 1633. El retablo mayor, también del XVII, se adorna con buenas pinturas. Una de las que se atribuyen a Zurbarán puede verse en la capilla de la Encarnación. En la parte baja del pueblo refulge de blanco encalado el Santuario de la Virgen de los Remedios, patrona de la localidad, levantado en el siglo XVIII.
Precisamente en el pueblo vecino de Fuente de Cantos tuvo su cuna uno de los pintores más conocidos de Extremadura, Francisco de Zurbarán (1598-1664). No es el único. En esta misma localidad también nació Nicolás Mejías Márquez, excelente pintor del siglo XIX.
A pesar de que no existe la certeza de que Zurbarán naciera precisamente en la que hoy se exhibe como Casa Museo de Zurbarán ese lugar es, desde luego, el sitio de Fuente de Cantos donde mejor se percibe su presencia. Con esa idea, al menos, se ha reconstruido y adecuado una casa tradicional con el ambiente y mobiliario propios del momento en el que nació el pintor. Es un recorrido íntimo que ayuda al visitante a acercarse a la vida, obra y personalidad de Zurbarán. Sí se sabe con certeza que el pintor nació en Fuente de Cantos el 7 de noviembre de 1598 y que vivió aquí hasta los 15 años. En 1614 se trasladó a Sevilla para comenzar su aprendizaje como pintor y desde allí regresó a la cercana localidad de Llerena, donde se afincó en un momento de gran dinamismo económico y comercial. Pero el lugar de Extremadura donde acercarse mejor a su obra es el monasterio de Guadalupe, que atesora en su sacristía algunas de las muestras más espectaculares de su talento, especialmente destacado en el retrato de monjes.
A unos cinco kilómetros de Fuente de Cantos por la carretera que lleva a Calera de León, en medio de una estepa desarbolada, merece la pena acercarse hasta el yacimiento de Los Castillejos. Las cimas de dos suaves elevaciones junto al río Bodión alojaron de manera sucesiva los poblados prerromanos de Castrillejos I y II en un periodo de ocupación que abarcó desde el Neolítico hasta el siglo I d.C.
El poderoso castillo entorno al que se apiña el caserío de Segura de León es el mejor conservado de cuantos erigió la Orden de Santiago en Extremadura. Fue levantado en el siglo XIV para que sirviera de residencia segura a sus comendadores, entre ellos al padre del poeta Garcilaso de la Vega y al último maestre de la orden, Alonso de Cárdenas. Para entonces, los caballeros de Santiago la habían convertido ya en una próspera encomienda dependiente del priorato de San Marcos de León tras recibirla de manos del rey Fernando III en torno a 1248. Para visitarlo, dada la estrechez de las calles y lo empinado de las cuestas lo mejor, es dejar el coche en la plaza Mayor.
La iglesia de la Asunción se construyó entre los siglos XIII al XVI. La capilla del Sagrario se cierra con una hermosa reja plateresca. El convento de la Reja o San Benito fue construido por los franciscanos, por concesión del Maestre de Santiago, Alonso de Cárdenas, entre 1477 y 1480. Su claustro mudéjar está decorado con frescos de escenas franciscanas. La talla del Cristo de la Reja, del XV, concita una gran veneración. En su honor tienen lugar en la plaza Mayor, a mediados de septiembre, Las Capeas, fiesta taurina de Interés Turístico Regional. En la parte baja del pueblo se sitúa la ermita de Los Remedios, junto al cementerio, con un importante retablo barroco.
El viaje prosigue hacia Fuentes de León, especialmente por el interés que suscita visitar el Monumento Natural y Cuevas de Fuentes de León. A dos kilómetros del pueblo, un desvío en la carretera que lleva a Cañaveral de León acerca por un camino de tierra hasta la entrada de este importante complejo kárstico formado por varias cavidades de distinta longitud y una gran variedad de fenómenos geológicos. Cueva del Agua, la más grande del complejo, es famosa por la nutrida colonia de murciélagos que alberga. Aunque no menos interés despiertan el lago interior de 200 metros cuadrados de superficie o las pinturas rupestres que hablan de su ocupación prehistórica.
Faldeando las estribaciones septentrionales de Sierra Morena se alcanza la localidad de Cabeza la Vaca, con una plaza de toros declarada Monumento Histórico Artístico y un rollo jurisdiccional. Desde la plaza en la que se ubica el rollo arranca, hacia arriba, la calle que enlaza con la carretera de montaña que lleva, en unos 15 kilómetros, hasta el monasterio de Tentudía. Un trayecto que, además de acercarnos hasta el techo de la provincia de Badajoz, brinda unas impagables panorámicas de la Sierra de Tentudía y las estribaciones de Sierra Morena.
La ubicación de un monasterio a 1.115 metros de altitud en un lugar tan pintoresco y con buenas vistas se explica, desde la leyenda, como un acto de agradecimiento a la Virgen por su intercesión en la campaña de Sevilla que, de la mano del Gran Maestre de la Orden, Pelayo Pérez Correa, mantenían los santiaguistas contra los musulmanes. Pérez Correa se encontraba al mando de las tropas que asediaban a las fuerzas musulmanas y estaba a punto de vencerlas cuando se acercaba ya la noche. Fue entonces cuando, para evitar que la victoria se le escapara de las manos con la llegada de la oscuridad, el gran maestre invocó a la Virgen con el ruego “Santa María, detén tu día”. Y el milagro se obró… en Tentudía.
En lo arquitectónico, el monasterio destaca por el encanto de su claustro mudéjar. En lo artístico, por el interés de su retablo mayor, realizado en 1518 por un azulejero sevillano. En lo espiritual, por la fe con que rezan a su Virgen en un amplia área de los pueblos de alrededor. Y en lo paisajístico, por un panorama que se desparrama en 360 grados hacia todos los horizontes de la provincia de Badajoz.
Si de la grandeza del paisaje no queda duda en lo alto del monte Tentudía, tampoco queda ninguna acerca del poderío que alcanzó en estas latitudes la Orden de Santiago mientras se visita la iglesia conventual que levantaron en Calera de León. Su monumentalidad da idea de la importancia que los caballeros dieron a esta posesión que llegó a ejercer como casa matriz del Priorato de San Marcos de León en el siglo XVI.
MÁS INFORMACIÓN
Casa Natal de Zurbarán de Fuente de Cantos: www.fuentedecantos.eu.
Segura de León: www.seguradeleon.es.
Monumento Natural y Cuevas de Fuentes de León: Para visitar las cuevas es preciso concertar la visita. www.cuevasturisticas.es; tel. Ayuntamiento Fuentes de León, 924 72 43 11; tel. Centro de Interpretación de la Naturaleza, 924 72 41 74.
Oficina de turismo de Calera de León: Tel. 924 58 40 84.